Los cuidadores son una parte vital de la función de un participante en un estudio clínico.
Como cuidador, puede apoyar a su ser querido y ser un segundo grupo de ojos para el equipo del estudio.
Queremos ofrecerle el apoyo que necesita como cuidador. Lea esta sección para decidir si la función es adecuada para usted y obtener consejos sobre cómo cuidar de usted mismo.
La función de un cuidador
Como cuidador, usted desempeña un papel clave en la experiencia que tiene su ser querido al participar en un estudio clínico. Antes de comenzar, es importante saber qué implica la función para que pueda decidir si el compromiso es adecuado para usted.
Las responsabilidades de un cuidador pueden incluir:
- Haga un seguimiento de las cantidades (dosis) del medicamento en investigación para asegurarse de que siguen las reglas del estudio clínico.
- Sea un defensor del participante y haga preguntas en nombre del participante si éste no puede.
- Informe al equipo del estudio sobre cualquier efecto secundario que haya notado o que el participante le diga.
- Tome notas en las visitas del estudio para que el participante pueda enfocarse en los médicos o las pruebas.
- Lleve al participante a las visitas del estudio y llévelo de vuelta a casa si no puede hacerlo él mismo.
- Ofrezca apoyo al participante si tiene dificultades mentales o emocionales.
El rol de un cuidador no es fácil, pero es invaluable tanto para el participante como para el equipo del estudio. Gran parte del éxito del estudio clínico depende de su apoyo y aliento.
Cómo cuidar de usted mismo cuando es cuidador
Brindar apoyo a un participante de un estudio clínico puede parecer exigente en ocasiones. Es fácil ponerse tan ocupado en su función que se olvida de sí mismo. Pero debe cuidarse a sí mismo si va a ayudar a cuidar a los demás.
- Coma alimentos saludables, por ejemplo, incluya frutas y veduras en sus refrigerios y comidas, y beba agua y otros líquidos cuando tenga sed.
- Descanse mucho para tener la energía necesaria para los demás: 7 a 8 horas de sueño por noche más siestas cortas si se cansa durante el día.
- Descanse regularmente para poder relajarse y liberar el estrés.
- Encuentre un pasatiempo para tener algo divertido que esperar.
- Controle su propia salud porque no puede ayudar a nadie si se enferma; por ejemplo, hágase el control anual y vacúnese contra la gripe.
- Conéctese con amigos para que puedan brindarle comodidad y apoyo.
Recuerde que el mundo no descansa sobre sus hombros. Es posible que desempeñe un rol de cuidador, pero es fundamental que también se cuide a sí mismo. Y pida ayuda a otras personas cuando la necesite.